Efecto Patronelli: Cada vez más gente se pega un palo con un cuatriciclo por hacerse el banana

Marcos y Alejandro Patronelli saltaron a la popularidad durante los últimos dos veranos gracias a obtener sendos triunfos en el rally Dakar en la categoría menos competitiva y emocionante de la carrera: los cuatriciclos.
Estos transportes, que junto a las 4x4 fueran casi un símbolo de los veraneantes menemistas de Pinamar en los 90, hoy han vuelto de la mano de los Patronelli.
Sin duda que el parque de cuatriciclos aumentó mucho en los últimos dos años gracias a que gran cantidad de nabos los compran para sentirse unos verdaderos "winners".
Estos fanas del cuatriclismo consideran que no hay nada mejor para disfrutar de la naturaleza de las playas argentinas que montar una máquina que hace un ruido insoportable y deja una estela de olor a nafta a su paso.

Incluso lograron que atropellar gente con el cuatriciclo se vuelva una moda y hasta alientan a los más pequeños para que se sumen, tal el caso de un niño de 6 años que atropelló con un cuatriciclo a un nene de 4.
Sépalo señor lector: hoy en día se venden cuatriciclos para niños y en algunas playas de la costa ya se puede ver a estos conductores kids manejando sin acompañante ni casco.
Antes alcanzaba con una pelota, una muñeca o un barrilete, para entretener a un niño. Hoy sin la Play y el cuatri no hay diversión.
Llamado a la solidaridad: Se necesitan más Messis y menos Patronellis, sino nunca volveremos a ser campeones "como en el 86" del único deporte que vale la pena en serio. Hagamos algo antes de que sea demasiado tarde...