Google y...la familia

Google nos ayuda en nuestras búsquedas en Internet a través de la función Autocompletar, donde al empezar a escribir lo que intentamos encontrar, nos indica las búsquedas más populares efectuadas por otros internautas.
La función Autocompletar es ya sin lugar a dudas para los analistas de variables "soft" una herramienta para el estudio y comprensión de la sociedad moderna -con acceso a Internet, por supuesto-, que permite conocer los principales intereses y preocupaciones del ciudadano común.
Así, al empezar a escribir "mi padre" nos encontramos como primera opción "mi padre me hace feliz en el dormitorio", luego siguen "mi padre me ama" (es el nombre de una canción), "me violó", "me coje", "me pega", y por último "mi padre no fue un gran hombre", algo muy lógico de pensar teniendo en cuentas las nueve sugerencias anteriores propuestas por Google.
Si empezamos a escribir "mi madre", nos encontramos con que "me violó", luego "alemana", "es mi amante", "me odia", y por último "me enseñó", indicando claramente que lo que enseña esta madre alemana promedio no es nada bueno.
Seguimos con "mi hijo", y las sugerencias de la función Autocompletar siguen siendo más de lo mismo.
Para "mi hija", continúan las cuestiones incestuosas.
En caso de intentar buscar "mi hermano", Google nos da como primera opción "se hizo flogger", demostrando que este flagelo es sufrido por gran cantidad de jóvenes que ven a su hermano perderse en el submundo del floggerismo y nada pueden hacer para salvarlo, excepto "buscar algo en Google". Después siguen otras opciones incestuosas que a esta altura ya son demasiado repetitivas pero no por esto dejan de ser un claro reflejo de los temas que preocupan a nuestra sociedad.
Al empezar a escribir "mi hermana", nuevamente aparecen opciones de abuso sexual con y sin acceso carnal, destacándose la sugerencia "mi hermana es mi esposa" aparece antes que "mi hermana es mi amante", curioso porque uno está acostumbrado a que la gente primero sea amante y luego se case. Aquí tenemos un claro cambio en las pautas culturales modernas, ya que no solo ahora es común que los hermanos sean pareja, sino que además se casan primero y luego son amantes.
Llegamos a "mi abuelo", donde las dos primeras sugerencias del buscador más usado del planeta son "me toca" y luego "me viola", siguiéndole en tercer lugar "mi abuelo tenía un violín", ¿que otro instrumento musical podría tener un abuelo que toca y viola a sus nietos?.
Al parecer, el único miembro relativamente sano del núcleo familiar sería la abuela, porque al comenzar a escribir "mi abuela" la primera opción es "mi abuela es un peligro" (una película), y luego "es una trola" (una decisión personal de ser homosexual sin joderle la vida a ningún familiar), luego aparece la segunda parte de esa película y siguen otras sugerencias no relacionadas a lo sexual, lo cual demuestra que en esta sociedad moderna la gente no tiene fantasías con su abuela.
Llegamos ahora a los tíos y sobrinos, y aquí parece armarse una gran orgía dentro de Google, porque prácticamente todas las sugerencias que nos da sobre estos miembros de la familia están relacionadas al sexo (forzado o no) en todas sus variantes.
La novedad con "mi sobrina" es la pedofilia implícita de un tío buscando en internet a su sobrina "de 13 años", "de 12 años", incluso hasta "de 8 años".
Ya pensando en las sobrinas que buscan información sobre sus tíos, curioso resulta que como quinta sugerencia, Google indique "mi tío quiere vender el duna", evidenciando que sería muy común entre todos los hombres del país querer vender su auto Fiat Duna y pedirle ayuda a su sobrina para lograrlo.
Con la búsqueda de "mi tía" se nota el toque histérico y erótico en "mi tía me provoca", "mi tía en licra" y "mi tía me seduce", aunque de todas formas la primera sugerencia (o sea, la más buscada) sigue siendo la cruda realidad de "me viola" (y hasta obtiene videos y fotos).