Bigote de Macri en el Caribe: "No vuelvo ni en pedo"

De hijo de empresario emergente a presidente de Boca, luego diputado nacional, y finalmente al mando del Ejecutivo de la Ciudad de Buenos Aires. La trayectoria ascendente de Mauricio Macri en la última década se vio acompañada por la lenta y progresiva desaparición de su bigote. ¿Una casualidad?

El Bigote de Macri aprovechó el viaje del Jefe de Gobierno porteño a República Dominicana para escapar y pedir asilo político en la Embajada de Birmania, país con el cual la Argentina no tiene firmado tratado de extradición. El mostacho manifestó al respecto que "hace tiempo que me quería escapar, no estaba de acuerdo con algunas decisiones de Mauricio, pero todo se precipitó cuando nos procesaron por las escuchas ilegales". Además explicó que eligió asilarse en la Embajada de Birmania, porque es el único país del mundo donde usar Internet es ilegal, "así no tengo que aguantar las tonterías que se dicen de mí en Twiter y Facebook, y además porque Mauricio me tenía podrido con las redes sociales".
El abandono del bigote podría traerle serias consecuencias políticas al líder del PRO, ya que algunos legisladores de la oposición pidieron formalmente su renuncia, debido al escaso respeto que genera el Ingeniero Macri sin mostacho, y se basaron en las propias palabras del Jefe de Gobierno, que hace días manifestó que “me tuve que dejar el bigote cuando tomé responsabilidades en la empresa. Por ahí le tenía que dar órdenes a tipos que tenían 20 años más que yo, entonces el bigote imponía respeto”. Los opositores argumentaron su pedido en que ahora que Macri no quiere asumir responsabilidades, se saca el bigote.
Curiosamente, el Jefe de Gobierno de la capital nacional expresó al diario más vendido del país que “no me arrepiento de nada, sólo de no haberme sacado antes el bigote”, ligando nuevamente la responsabilidad por su accionar con el mostacho. Interesante resulta saber que la palabra "bigote" nació en España como sinónimo de "el que jura y blasfema". Pero en nuestro país, en el lenguaje carcelario "bigote" se aplica como sinónimo de gato, cobbani ó policía. ¿Cómo no ligar entonces al Bigote de Macri con la responsabilidad legal y política por las escuchas ilegales de la Policía Metropolitana? Al parecer esa sería la estrategia de los abogados de Mauricio Macri: culpar de todo al bigote.